‘Nada’, un libro intenso

Por Enrique Figueroa Anaya.

La sinopsis es simple. El puberto Pierre Antón decide un día dejar la escuela debido a que la vida no tiene ningún sentido. Tras subirse a un árbol y gritar las razones por las que nada le importa en la vida, sus compañeros deciden llevarle objetos con la única intención de mostrarle a Pierre que está equivocado; que hay en realidad cosas que dan sentido. ¿Lo lograrán?

‘Nada’, un libro intenso.

La novelista danesa de origen austro-germano, Janne Teller, ha vivido y trabajado en conlfictos humanitarios en lugares tan diversos como Bangladesh, Mozambique y Tanzania; sería hasta 1995 cuando decidiría dejar su carrera y dedicarse completamente a la literatura. Desde entonces ha recibdo premios y becas que le han ayudado a su carrera; sus libros, sobre todo de filosofía, han causado polémica y controversia en su natal Dinamarca. Nada, no es la excepción.

Cuando me platicaron de este libro, disponible en México bajo el sello de Seix Barral, me llamó poderosamente la atención su sinopsis. No cabe duda que resultaba interesante; un libro donde niños, antes de dar el paso a la adolescencia, se preguntan sobre algo tan complicado como el sentido de la vida, y más allá, si es que acaso había un sentido de éste.

Terminé el libro y me quedó una profunda sensación de zozobra. El libro, que leí casi de una sentada, aunque deteniéndome por los nudos en la garganta que éste me había provocado, es perturbador. Si bien se trata de una novela, el ejercicio literario de Teller provoca una profunda reflexión.

La trama nos pone frente a un grupo de niños intentando convencer a un compañero sobre la valía de la vida con una serie de objetos que van desde libros hasta mascotas; pareciendo sencilla, la historia se complica cuando éstos se ven obligados a continuar con las aportaciones que parecen un juego, pero que al final terminan pareciendo amenazantes e incómodas.

Nada es un libro intenso, intenso pero bien escrito. Se trata de una sátira donde la autora nos presenta los componentes de nuestra sociedad; es también un conjunto de dilemas psicológicos y existenciales sobre el sentido de la vida, donde dependiendo de nuestra sensibilidad, encontraremos algunos otros cuestionamientos.

No les voy a mentir, podría ser para algunos un libro que no guste. El suspenso de la trama, que no deja que le soltemos, nos va llevando hacia un final siniestro, desalentador y sumamente obscuro. No por nada ha sido un libro prohibido en países tan avanzados como Suecia y Noruega.

¿Lo recomiendo? Completamente. Se trata de una bofetada necesaria en tiempos como los que vivimos; sin duda se antoja discutirlo con otros lectores, aunque eso sí, días después de leerlo. Es un libro duro; sin duda el mejor libro que he leído en este año.