Por Asfaltos.
Era una tarde de domingo, 14 de mayo de 2006, cuando yo siendo un chamaco de 20 años de edad viví mi primer Vive Latino; mi primer festival de esa magnitud, si no me equivoco. Probablemente fue la primer banda que vi sobre el escenario, o quizá la segunda (después de Tolidos), el asunto es que con sus sombreros y tremendo desmadre, los Tex Tex captaron la atención de alguien que generacionalmente les era ajeno; pero que ciertamente resultó más cercano de lo que se imaginaba.
Permítanme esta licencia de repetir tan cercanamente a un grupo en mi Miércoles nostálgico, pero el deceso reciente de Lalo Tex, «El muñeco», no podía ameritar otra cosa que no fuera recordarle en esta sección. Uno de los músicos más importantes de la escena rocanrolera nacional se nos fue dejándonos un tremendo hueco en el corazón. Yo, que llegué a él ya tarde, sigo recordando aquel momento de 2006 en el que captó mi atención por su tremenda energía.
Aquella fecha del Vive Latino recuerdo haber visto a Víctimas del Dr. Cerebro, Los Esquzitos, Los Tres y Jumbo, entre otros; sin embargo, en mi memoria, guardo un momento especial para los Tex Tex, quienes sorprendieron a muchos de mi edad en ese momento que simplemente no les conocíamos; y que a partir de ahí les seguimos y disfrutamos cada que pudimos.
Porque si bien la vida de un rocanrolero tendrá, como todas, sus dificultades; al final trasciende, pues con su música como con la que hoy recordamos al líder de los Tex Tex, se vuelve inmortal.
Para recordarle y despedirle como se merece: «Pobre rocanrolero». ¡Hasta siempre Lalo Tex, hasta siempre!
Imagen tomada del Facebook de la banda.
Leave a comment
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.