La película «Los presentes», dirigida y escrita por Alejandro Molina, narra la historia de Ana, una actriz casada con Eduardo (Moisés Arizmedi), con quien tiene un hijo de 5 años llamado Alex.
La historia retrata el conflicto en el que entra Ana, ya en sus 30, entre buscar la libertad o mantener a sus seres queridos (hecho impulsado por volver a tomar un personaje teatral). «Los presentes», además de basarse en una obra clásica como lo es «Hamlet», presenta referencias también a la leyenda de los volcanes que cobra vida con los protagonistas.
Un detalle muy destacable del filme es que Ana es interpretada por dos actrices (Camila Selser y Mariana Burelli), hecho que funciona para representar el despertar de Ofelia y demostrarnos la dualidad y los conflictos internos que Ana lleva con ella. Lo positivo de esta representación es que nos lleva a descubrir a un personaje que es más complejo de lo que estamos acostumbrados, ya que el director no separa a cada actriz en “la buena y la mala”, sino que retrata todas las caras y facetas que una persona lleva dentro y fuera, apoyándose de las tres divisiones en la trama (pasados, presentes y futuros). Aunque la protagonista no se divide entre buena y mala, ssí se dividen en sus distintos objetivos que la llevan a su problemática: aquella que busca fluir y la otra que busca mantenerse fija.
También se resalta el efecto que el nuevo despertar de Ana genera en su marido y su hijo, ambos temerosos de perderla y, en el caso de Eduardo, una mirada a lo que pudo o no pudo haber sido y su incansable lucha por aceptar a su esposa dentro de su travesía (en la cual incluyen problemas psiquiátricos e infidelidades).
La historia llega a ser bastante confusa en algunos puntos, pues sus temas fantásticos y psicológicos complican agarrarle el hilo, y afectan directamente también a la comprensión de la narrativa. Dentro de lo fantástico, resalta el paralelismo entre la leyenda de los volcanes como lo es la representación teatral de «Hamlet» (Ofelia, en este caso), careciendo de comprensión de cuál fue la intención de Molina en incluir ambas historias. «Los presentes» es de esas cintas que se requieren de ver más de una vez para llegar a una mayor comprensión (y que, en caso de disfrutar de las tramas psicológicas, se hará con gusto).
Al final, el objetivo claro de Molina es demostrar la complejidad que es llevar una familia: no es lizo, pero tampoco es fragmentada; es una mezcla de ambas. Es decir, no es perfecta pero tampoco es imperfecta.
«Los presentes» estrenó el fin de semana pasado en Ciudad de México en Cineteca Nacional, Cinemanía, Film Club Café, IPN, FARO Aragón, Casa del Lago, Cineclub Condesa DF y FARO Tláhuac.
Con imágenes cortesía de Pop Comunicación.
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