Por Asfaltos.
La otra vez, en uno de mis tantos trayectos por la capital mexicana, me encontré deambulando por un parque. Era un parque de una colonia por la que caminaba por vez primera; un parque pequeño, un tanto olvidado, un tanto abandonado. Me ponía a pensar, hacia mis adentros, sobre el tiempo de plenitud de ese pequeño lugar.
Seguro cuando se inauguró el parque lucía en todo su esplendor. Las familias se dejaron venir, las autoridades lo presumían y los vecinos muy seguramente sonreían. ¡Era su parque, ese que les daba tanto orgullo presumir! Ese que hoy luce desechado, sucio…
En Ciudad de México nos encontramos con parques realmente hermosos. Alameda Central, por ejemplo, bellamente remozada, es uno de los más antiguos y también uno de los más emblemáticos. Lamentablemente, como ese parque anónimo en esa colonia por la que pasaba, hay muchos otros más que han caído en el desprecio no solo de las autoridades, sino también de sus propios vecinos.
¿En sus colonias hay parques? ¿Cómo les gustan los parques? Mientras piensan qué responderme les dejo la canción «Paseo por el parque» de los españoles Los Planetas; un tema instrumental muy sencillo (solo cuatro acordes y un silbido), que bien ilustra lo que debería ser en efecto un paseo en parque: algo que se disfruta, y no algo que se lamenta.
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