Mexicanos en el olvido, ¿el hambre, también se olvida?

«El hambre espía en la casa de los pobres, pero si la habitan personas trabajadoras, no se atreve a entrar», (Benjamín Franklin). México es un pueblo de gente comprometida y trabajadora, millones somos los mexicanos que día a día salimos para construir el futuro de las próximas generaciones. Pero en ocasiones el esfuerzo no basta, en los últimos años, el aumento de temperatura en la Tierra ha intensificado las sequias y los desastres naturales, dejando a los más vulnerables en extremo peligro.

En México se ha presentado una emergencia, la ultima temporada de frio y la extensa sequia han ocasionado hambre entre la población, sobre todo los más desprotegidos. El gobierno federal declaro una “emergencia” debido al hambre entre los habitantes de la Sierra Tarahumara, uno de los tantos grupos indígenas que viven en el olvido de las políticas públicas.

Pero, ¿es necesario una crisis alimentaria, o la muerte para incluir en el escenario a nuestra población indígena? México cuenta con aproximadamente 56 etnias indígenas distintas, ¿es necesario que mueran de hambre para que se consideren dentro de las políticas públicas?

Tal es el caso de los Tarahumaras, o como ellos se hacen llamar Rarámuri, que significa corredores a pie. Existen alrededor de 70, 000 tarahumaras, quienes viven de una forma semi-nómada, cultivan en tierras altas durante el verano y en las partes bajas del cañón durante el invierno, viven en pequeñas granjas dispersas, pero debido al olvido al que están sujetos sufren de rezago social y hambre.

El gobierno parece no tener proyectos y rumbos claros para la inclusión de la población indígena y es ahí cuando la sociedad civil toma un papel importante. Asociación Pro Indígena es una asociación civil cuyo principal objetivo es contrarrestar la problemática de salud y la marginalidad de los indígenas que viven en el Estado de Chihuahua. Cuenta con distintos proyectos de salud, educación y producción, lleva trabajando alrededor de 14 años con esta labor.

La transformación en la sociedad es inevitable y en un mundo cambiante e inestable es necesario un esfuerzo conjunto entre sociedad, empresas y gobierno. Ya que en un país donde 15,7 millones de personas se consideran indígenas, es necesario políticas de inclusión que ayuden a prevenir las tragedias y el hambre. «Ayudar siempre es bueno pero la caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; mientras que la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo», (Eduardo Galeano).