- Tweet
Por Viry Masfalda (de Masfaldas).
Durante nuestra vida hemos escuchado hasta el cansancio lo importante que es el control de los impulsos, la fuerza de voluntad y el control de sí mismo. Según los estudios llegar a tener esta característica se considera un rasgo de personalidad positiva y bien puede ser importante para lograr el éxito en la vida. Por otro lado, las personas que carecen de este rasgo psicológico se dice que necesitan una gratificación al instante y podrían sufrir de un pobre control de los mismos.
Uno de los experimentos más exitosos sobre el comportamiento es La prueba del bombón de Stanford (Walter Mischel psicólogo de la Universidad de Stanford, 1972), que consiste en colocar niños de edad pre-escolar en un cuarto sin ningún tipo de distracción, únicamente una mesa, una silla y un plato con un bombón; bajo la oferta de resistir a comerlo durante 15 minutos tras lo cual le darían 1 bombón más. Finalmente podría comer 2 en lugar de 1. Los científicos analizaron el tiempo en que cada niño resistió la tentación de comer el bombón y si esto tuvo un efecto en su éxito futuro; algunos niños fueron descritos 10 años después por sus padres como adolescentes significativamente más competentes.
Las reacciones de los niños al control de los impulsos en el siguiente video son muy interesantes y divertidas a la vez; los invito a verlo y a transportarse al momento en el que ustedes, mi querida banda, estaban en el kínder y se pregunten: “¿Que hubieran hecho si?” Quizás ahora podrían entender que desarrollar la habilidad de esperar para obtener algo que uno quiere evita tener conflictos de comportamiento y conducta. Que lo disfruten.
Les mando 1 beso, y si esperan, les mando 2.
Leave a comment
Lo siento, debes estar conectado para publicar un comentario.